Bigtech en el Sector Financiero, desafíos según BIS
La estabilidad financiera, preservar la competencia y la gobernanza de los datos, son los principales desafíos que plantea la irrupción de las llamadas bigtech en el Sector Financiero, dijo Agustín Carstens, gerente general del Banco de Pagos Internacionales (BIS, por sus siglas en inglés).
En la conferencia “Regulando a las bigtech: entre regulación financiera, antimonopolio y privacidad de datos”, el mexicano destacó que algunos de estos desafíos son familiares para los reguladores, pero otros no. “Para los bancos centrales y los reguladores financieros, el primer y más directo conjunto de desafíos de las big tech se centra en la estabilidad financiera”, expuso.
Detalló que los gigantes tecnológicos tienen ventajas derivadas de los datos de sus usuarios, lo que conduce a amplias redes y gama de actividades. Con esto, apuntó, pueden pasar muy rápidamente de ser “demasiado pequeñas para preocuparse”, a “demasiado grandes para ignorarlas” y después a “demasiado grandes para fallar”.
Carstens resaltó que sólo cuatro grandes tecnológicas brindan casi dos tercios de los servicios globales en la nube, que se está convirtiendo en un servicio crítico para el Sector Financiero.
El segundo desafío que señaló el gerente general del BIS, es el de preservar la competencia leal, lo cual es de especial relevancia para las autoridades en la materia, dado que las bigtech tienen varias ventajas competitivas sobre otras empresas, en virtud de sus modelos de negocio, tecnología y redes.
Y un tercer conjunto de desafíos, dijo, está relacionado con la gobernanza de los datos, pues las bigtech tienen un incentivo para recopilar información personal de los usuarios, al ser la clave de su negocio.
El gerente general del BIS comentó que las bigtech han llegado a representar el 94% de los pagos móviles en China en tan sólo pocos años; mientras que el crédito otorgado por estas creció 40% en el 2020 para un total global de 700,000 millones de dólares.
“Más allá del crédito, las propuestas de las grandes monedas estables (stablecoin) de tecnología como Diem de Facebook, pronto podrían lanzarse, probablemente con una rápida adopción en todo el mundo”, expuso.
Carstens destacó que existen argumentos sólidos para fortalecer la cooperación regulatoria, no sólo entre bancos centrales y autoridades, sino también las relacionadas con la competencia y protección de datos.
Fuente: El Economista.