Kapital optó por comprar un banco para no tener limitaciones en
La fiebre del nearshoring: mitos y realidades
Laura Iturbide Galindo1
Carmen Santiesteban Calderón2
Existe una fiebre por la re localización de empresas, que busca cercanía con sus centros de consumo. Algunos factores se alinearon tales como: la guerra comercial de Estados Unidos y China, la interrupción de las cadenas de suministro con la pandemia COVID-19, los aumentos en costos principalmente mano de obra y la guerra Rusia-Ucrania, que están haciendo que los inversionistas de varios lugares del mundo estén trasladando a México sus fábricas, centros de producción y distribución. Se estima que el nearshoring atraería al país alrededor de 30 mil mdd.
El nearshoring se refiere a una estrategia que busca la relocalización por parte de las empresas de sus centros y procesos de producción a ubicaciones con mayor cercanía con el objetivo de eficientar, mejorar el control y reducir las implicaciones logísticas y de costes.
En efecto la popularidad de este fenómeno se incrementa a pasos agigantados y México se vuelve muy atractivo para instalar la manufactura que se traslada de otras regiones, particularmente de Asia por la competitividad del capital humano, tratados comerciales; pero sobre todo, por la cercanía con Estados Unidos lo que lleva implícito una importante reducción en costos. A la vez que permite la disponibilidad de suministros y facilita su distribución en el mercado.
El nearshoring nos ofrece una oportunidad única en el país y se abren perspectivas de crecimiento en muchos sectores, tales como: automotriz, farmacéutica, textil, telecomunicaciones, tecnologías de la información, energía, aparatos eléctricos, dispositivos médicos, entre muchos otros, en donde hay lista de espera de inversionistas, y de acuerdo a cifras preliminares de la Secretaría de Economía el 2022 cerró con el mejor nivel de Inversión Extranjera Directa en 7 años (35.3 mil mdd, 12% más en relación a 2021). En particular nuestros socios del Tratado de Libre Comercio México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) expresaron su interés en semiconductores y vehículos eléctricos, lo que indica no solo una política comercial más activa sino una política pública comprometida para su promoción. Esto significa que, siendo dos sectores estratégicos, se debería recapitular de cómo ganar ventajas competitivas, al menos, en materia de logística, infraestructura (de acuerdo al Fondo Inmobiliario Meor, actualmente tenemos un déficit de 11 millones de metros cuadrados en naves industriales y en la frontera norte y corredores importantes está agotada la disponibilidad) capacidades técnicas especializadas, para en realidad poder aprovechar la opción.
La manufactura mundial necesita empuje, muchos países, incluyendo el nuestro, están en zona de contracción, de acuerdo a la metodología PMI, en gran parte por los altos costos de la energía y la debilidad de la demanda. La re localización reconoce la urgencia de buscar alternativas para ganar competitividad; la geolocalización y la demografía favorecen a México, para ser candidato idóneo, pero no es el único factor, como los antes mencionados.
La llegada a México de inversiones para el rediseño de las cadenas de suministro, es una oportunidad única para México. Del total de empresas que quieren re localizarse, las estadounidenses y canadienses representan el 80%. El nearshoring es, sin duda, un detonador de crecimiento y desarrollo económicos, que no solo permitirá al país fortalecer su posición en el T-MEC, sino convertir a Norteamérica en una región comercialmente muy integrada.
1Directora del Instituto de Desarrollo Empresarial Anáhuac en la Universidad Anáhuac, México Norte. El correo electrónico es idea@anahuac.mx y la cuenta de Twitter es @IDEA_Anahuac.
2 Coordinadora de la Aceleradora de Negocios, AcelerA de la Universidad Anáhuac México.